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Cuando se piensa en los maestros cubanos, nombres como los de Wilfredo Lam, Amelia Peláez y Rafael Soriano vienen inmediatamente a la mente. Pero hay una nueva generación de maestros cubanos, y en ella se inscribe el nombre de Eladio González. Nacido en 1937 en Itabo, provincia de Matanzas (Cuba), González estudió con Soriano y comenzó su formación artística en la Escuela de Bellas Artes de Tarasco. En 1962 finalizó sus estudios de arte en la Academia de San Alejandro. Hasta 1967, se desempeñó como escultor en el Consejo Nacional de Cultura de Cuba. Luego dejó su patria definitivamente y pasó un breve período de tiempo en España y Francia antes de radicarse en los Estados Unidos como artista exiliado. Allí ha trabajado durante los últimos 33 años. Ha producido una impresionante colección de pinturas y esculturas en bronce. En ambas disciplinas, que muestran una fuerte influencia cubista, ha sobresalido por su talento y por la precisión de su técnica. Sus pinturas rebosan de colores llamativos, a veces tropicales y su estilo ha sido descrito por un crítico como "Erotismo Abstracto" debido a la naturaleza sexual de las formas abstractas que crea y a la aparente "orgía" de color. Sus esculturas están dotadas de una inalterable originalidad. Su obra está representada en Chicago por la galería Collins Fine Art.
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"Autoretrato" 18" x 7" x 10", bronze
