NUEVA YORK: MARIANA CASTILLO DEBALL PRESENTA "POINT" EN KURIMANZUTTO

En el espacio neoyorquino de la emblemática galería kurimanzutto, la artista Mariana Castillo Deball (México, 1975) presenta Point. Reuniendo sus producciones más recientes, la artista latinoamericana utiliza obras desarrolladas sobre papel e impresiones sobre otros materiales para ilustrar las similitudes que hay entre las hojas, la piel y el papel.

View of Mariana Castillo Deball, Point, kurimanzutto 2019. Courtesy of the artist. Photo: Documentation Art.

Point pone de manifiesto la naturaleza intrínseca de la piel con relación al papel. Desde la perspectiva de Castillo Deball, el papel, como envoltorio, posee la misma función que la piel en los humanos, los animales y las plantas. Establecido este vínculo, la artista mexicana exhibe en sus obras injertos de una misma piel que se extiende hasta la capa que rodea al pensamiento en sí mismo. Una piel que se puede compartir actuando como un tejido extendido entre diferentes cuerpos.

La exposición inicia con el dibujo Petlacoatl (palabra que en la lengua Nahua quiere decir: Tapete tejido de serpientes que apuntan en todas direcciones). Este dibujo, en la cultura Nahua, representaba un presagio en el calendario adivinatorio. Aquel o aquella que daba con el tapete tenía dos posibilidades: morir en el instante o, en caso de sentarse sobre él, transformarse en monarca. Más adelante, Castillo Deball presenta diferentes representaciones Xipe Totec, un dios que utiliza la piel de un hombre como capa. “Xip”, en Nahua quiere decir tanto “piel”, como “cobertura” o “cubierta”. De esta forma, la artista juega con los conceptos y pone a la misma piel humana como un material que podría estar destinado a otros fines.

Además, Point recurre a una serie de proyectos en formato de libros conocido como Do ut des. Estos proyectos consisten en libros alterados desde su exterior que, una vez abiertos presentan un patrón común. Cada libro está dedicado a un museo diferente en el mundo y contiene un collage extendido que muestra las dimensiones de las obras de arte en el espacio de exposición en relación con la escala humana.

Montada excepcionalmente en kurimanzutto –ubicada en el corazón de Nueva York-, Mariana Castillo Deball presenta un microcosmos que dialoga directamente con las culturas aborígenes de su región. Point permanecerá abierta al público hasta el 6 de abril.