REVIEWS - JOSÉ BEDIA

Spativm, Caracas

Por Suazo, Felix
REVIEWS - JOSÉ BEDIA
Considerado como una de las figuras imprescindibles del llamado Renacimiento Cubano de los años ochenta, José Bedia permanece tan activo y consistente como durante aquellos años legendarios. Residenciado en La Florida y con una agenda atiborrada de compromisos, esta vez exhibe parte de su trabajo reciente en la Galerí­a Spativm de Caracas. Al menos una señal, tí­tulo de la muestra inaugurada el 6 de noviembre, está compuesta por una serie de 15 trabajos en los que se confunden lo pictórico, lo gráfico y lo textual, pero siempre sujeto a una trama simbólica en la que se adivinan presagios y sentencias alusivas a los mitos originarios de diversas culturas.
Bedia conjuga hábilmente elementos locales (algunos de ellos propios de la cosmogoní­a afrocaribeña) y soluciones plásticas capaces de funcionar en cualquier contexto. La suya es una estrategia dialógica, glosolática, concebida en la encrucijada de diversos lenguajes y culturas. Allí­ lo humano se debate entre la causalidad natural y el nihilismo, como si en esa lucha por zafarse del pragmatismo se enfrentara a un poder inexplicable que lo supera. En este sentido, cada obra se enmarca en un ciclo vital que involucra imágenes arquetí­picas y referencias cósmicas: astros y ví­rgenes, montañas y chamanes, plantas e individuos.
Con trazo elemental y estilizado, los trabajos están facturados sobre tela, en formatos apaisados (algunos incluso extremando el lí­mite perceptivo de la horizontalidad), verticales y circulares (éstos últimos, de mayor concentración simbólica). Luego vienen los muy significativos juegos de escala donde las figuras se magnifican adquiriendo una dimensión totémica o aparecen minimizadas cual criaturas arrojadas a un espacio desértico. Allí­ están el hombre y su doble en una convivencia arcaica, armoniosa y paradójica a la vez.
Diestro dibujante, colorista sobrio y dominador de atmósferas sugerentes, Bedia retoma en esta exposición -la primera individual que realiza en Venezuela- el repertorio iconográfico que caracteriza su obra. A partir de allí­, establece un suave contrapunto entre el gesto y la materia, administrando con astucia las transparencias, los chorreados y las texturas. Una señal, al menos, de que aún después de las jornadas cumplidas, su credo artí­stico continúa intacto.