EL GUGGENHEIM DE NUEVA YORK ACEPTA UNA DONACIÓN QUE DESPIERTA CONTROVERSIA

Por Mercedes Abella

La semana pasada, el Museo Guggenheim de Manhattan recibió un manual de instrucciones valuado entre 120.000 y 150.000 dólares.  El manual mismo no es una obra, sino 14 páginas de detalladas disposiciones sobre cómo, dónde y cada cuantos días cambiar la banana. Si, se trata de “Comedian”, la obra de arte conceptual que se hizo viral el año pasado en el marco de Art Basel Miami Beach.

EL GUGGENHEIM DE NUEVA YORK ACEPTA UNA DONACIÓN QUE DESPIERTA CONTROVERSIA

La obra del artista italiano Maurizio Cattelan transmite una ironía que es difícil ignorar. Como es usual en el arte conceptual, la obra desencadenó una multitud de discusiones y brindó la oportunidad para analizar el rol del arte, cuestionar la forma en que funciona su mercado, y ponderar la responsabilidad de los medios y la explosividad de lo escandaloso. Resulta interesante la forma en la que la existencia, y sobretodo la compraventa, de esta obra llevan al extremo las reglas del juego para provocar una re-interpretación del papel de cada una de las entidades que forman parte del mundo del arte: artista, obra, espectador, galerías, y, ahora con la noticia del Guggenheim, los museos. En un juego de humor y sarcasmo, Comedian se balancea en un límite casi peligroso de la definición del arte donde arriesga perder toda seriedad y ridiculizar el concepto de valor. Siendo un arma de doble filo, se puede considerar que Comedian abusa de su carácter disruptivo. ¿Dónde está el límite entre crítica y burla, humor e insulto? Una discusión filosófica que no deja de dilatarse y que haya en esta noticia un cénit; un vértice del planteo artístico contemporáneo por antonomasia.

 

Este debate es ahora reanimado con el anuncio de que el museo Solomon R. Guggenheim de Nueva York aceptó una donación anónima de la obra, que dicho sea de paso no incluye ni banana ni duct tape. “Estamos agradecidos por recibir ‘Comedian’ como regalo, una demostración más de la hábil conexión del artista con la historia del arte moderno”, dijo el director del Guggenheim, Richard Armstrong. La comicidad del hecho no escapa de él, quien agregó "Además, ofrece poco estrés a nuestro almacenamiento".

 

Arte al Día, dirigida por Diego Costa Peuser, cuestiona la acción del Guggenheim, estimada institución, y se pregunta por lo que todo esto repercute afuera de las esferas estrictamente artísticas. ¿Cómo nos representa? ¿Qué tanto nos dejamos llevar por lo rebelde y novedoso? Excentricidad, sensacionalismo y fatuidad son algunas de las sentencias que recibe el arte contemporáneo y que el circo que rodea a “Comedian” aviva.