Martin Pelenur presenta “Ballena” en el centro Cultural Docecá
Centro Cultural Docecá de Montevideo.
Marín Pelenur inaugura su nueva exhibición individual “Ballena” en el Centro Cultural Docecá de Montevideo. Curada por Marín Craciun, la exhibición incluye una nueva serie de pinturas junto a una instalación Site Specific. La intervención transforma el espacio exhibitivo en una máquina que busca reflexionar sobre la repetición y el tiempo.
Martin Pelenur “Ballena”
www.martinpelenur.com
inuaguración 12 de abril 19hs. Abierto hasta junio.
Centro Cultural Dodecá (www.dodeca.org)
San Nicolás 1306, Montevideo, Uruguay.
Texto Curatorial:
§ "Oh, my. So the whale swallowed all of you, too? My goodness."
— Geppetto talking to Pinoccio
Una secuencia de materiales industriales y procesos son ordenados de manera obsesiva. La idea de que la experiencia de prestar mucha atención puede resultar en una actividad placentera en cualquier contexto es relativa. Lo cierto es que la inteligencia visual es algo muy importante en el tiempo de la circulación acelerada de imágenes. La desaceleración, junto a la ralentización del tiempo y la percepción son estrategias fundamentales para poder estudiar las cosas en detalle. Así como enunciaba Gustave Flaubert, dios está en los detalles. Un mundo de informaciones originales, de gráficos y formas, de sincronías y arritmias que velan y revelan.
El espacio es transformado en un taller para un proceso. El sistema como el proceso, lo material y la forma. La materia, el fracaso y la indeterminación controlada. La ballena azul de Pelenur es el tiempo y la forma; controlar el resultado sobre la base de la catálisis, estudiar la forma y transformarse en un aficionado de los químicos y la repetición de procesos. El barniz es un medio físico al que moldear y dar forma pero también un vehículo para expresar contenidos e ideas. De una forma u otra se introducen aquí los desafíos de la vida en el arte como su contenido.
La exposición es un ejercicio, el de traducir a la sala de exposiciones de Dodecá el universo de Pelenur y sus temporalidades. La instalación se transforma en una maquina para producir y pensar, su laboratorio. Su desafío, el de generar un espesor suficiente y estructural, micras de barniz, acumulados en incontables capas que reposan durante semanas y se erigen en piezas industriales.
Pelenur se ha dedicado a desarrollar un experimento sostenido sobre la pintura. Busca constantemente modificar su enfoque, resistiendo la comodidad de las tendencias y manteniendo la frescura de una práctica que lo apasiona. Cada experiencia nutre la próxima para generar insumos hacia su siguiente movimiento.
