Mitos de Fundación
Proyecto conjunto de Fundación TEOR/éTica y MUCA Roma
“1999 –escribe Luis A. Orozco, curador del MUCA Roma- es el año en que iniciaron sus actividades dos espacios dedicados a la difusión y exhibición del arte joven producido en distintos contextos, diferentes en sus orígenes, pero similares ya que apuestan por proyectos experimentales y hasta cierto punto periféricos.
MUCA Roma, localizado en Ciudad de México, es un espacio universitario e incluyente donde se ha abierto una ventana a la producción joven de distintas escenas locales latinoamericanas. La Fundación TEOR/éTica, con sede en San José de Costa Rica, es un espacio dedicado a promover la reflexión en torno a la producción realizada por los creadores de Centroamérica, zona que en el panorama internacional ha sido más bien célebre por su conflictiva social y política. Su trabajo constante sobre iniciativas locales ha dado forma a la construcción de plataformas para un número importante de artistas y teóricos y ha sido fundamental en la construcción de discursos y de una comunidad (creadores, consumidores, coleccionistas y curadores) preocupada por integrarse a un circuito del arte que les había ignorado hasta hace algunos años”. La primera de varias actividades en conjunto con la Fundación TEOR/éTica, proyecto hermano de MUCA Roma es la exhibición en la sede de este espacio de Mitos de Fundación, con obras de los costarricenses Alberto Hernández, Priscilla Monge, Joaquín Rodríguez del Paso y Karla Solano.
El curador Jurgen Ureña escribió el ensayo de la exhibición con un texto del cual reproducimos varios fragmentos:
“Como propone el teórico George Steiner, la obra artística expresa en esencia aquellos conflictos trascendentales que son sublimados precisamente mediante el mito… Mitos de fundación da cuenta de esa retroalimentación permanente entre mito y arte contemporáneo, mediante la obra de cuatro artistas costarricenses disímiles en sus técnicas y temáticas particulares, pero coincidentes en su capacidad de derribar algunas de las ingenuas visiones originarias sobre la llamada “Suiza centroamericana. Se propone como una primera aproximación al derribo de la Arcadia tropical. Es también el inicio de un intercambio que se concreta a partir de fundaciones, saberes y demoliciones comunes; una experiencia que sin duda nos encontrará, al final de este largo viaje de ida y vuelta, generosamente recompensados”.
“La diferencia entre mito y cotidianidad, entre observadores y observados y entre visibles e invisibles, es la base de la serie fotográfica RIP, Retratos Inconclusos Policiales (2011), de José Alberto Hernández, que se muestra parcialmente en esta exposición. En ésta, Hernández aborda el retrato policial desde su reverso y propone una imagen borrosa, indeterminada en sus rasgos particulares, que sirve para dudar y no ya para identificar. Desde sus primeras series fotográficas, ha desarrollado una obra que induce a la reflexión sobre la fragilidad de la vida y a las acechanzas de la muerte…Así, el artista propone una nueva reflexión en torno a la cándida idea de los igualiticos y ofrece la instantánea de una Costa Rica que no difiere demasiado de los demás países latinoamericanos, con una riqueza concentrada en manos de unos pocos y una polarización del poder y de los medios de producción que ha creado una amplia clase social, invisible, anónima, borrosa y expuesta permanentemente a la estela criminal”.
“De forma paralela, Priscilla Monge cuestiona el pasado costarricense, pacífico, blanco, inmaculado y transparente, mediante las obras Fuente (2009) y Almohada (2011): una intervención en el espacio exterior y una proyección audiovisual sobre almohadas de mármol, respectivamente. En las obras exhibidas en Mitos de fundación, Monge explora las irregularidades que habitan en los espacios que consideramos seguros, plácidos o asépticos, a partir de la evocación de la sangre. En estas propuestas el origen de la violencia social se desconoce pero no así sus síntomas, similares —cuando no idénticos— tal como ocurre entre las historias costarricense y latinoamericana, a pesar de que el mito se esfuerce en negarlo. Aquí, una vez más, la Costa Rica de idealizados abolengos choca de frente con la más inmediata cotidianidad”.
“La negación y el sometimiento de la mirada son abordadas por Karla Solano en sus obras A ciegas (2011) y En la mira (2011): una intervención sobre la fachada del edificio que alberga a MUCA Roma y una propuesta para su espacio interno, en las que mirar, vigilar, acusar y negar parecen caras de una misma moneda. En su trabajo más reciente, los ojos —y las manos sobre los ojos— de Karla Solano, recuerdan a los tres monos sabios de oriente y su célebre consigna: “no ver, no oír, no decir”. Ahora, la reflexión sobre el cuerpo y lo colectivo deriva hacia la reflexión sobre la responsabilidad social. En el contexto de Mitos de fundación, A ciegas y En la mira nos recuerdan la fragilidad del individuo ante un sistema que le “recomienda” la prudencia de no observar, escuchar, o denunciar las grotescas inconsistencias entre la Arcadia tropical y la Costa Rica cotidiana”.
“Finalmente, la obra Leg Godt (2010), de Joaquín Rodríguez del Paso, nos regresa al imaginario de las edificaciones precolombinas bajo la singular apariencia de un Chac Mool con forma de Lego. Con Leg Godt -que en danés significa “juega bien”- Rodríguez del Paso retoma una obra suya concebida en 1996, compuesta por una serie de esculturas pequeñas de forma similar. En esa oportunidad el artista fabulaba con el descubrimiento de seis figuras hechas de Lego en forma de Chac Mool, en un lugar apócrifo llamado Umantla. Rodríguez del Paso reflexiona sobre conceptos como la autoría, la legitimidad y la originalidad, a la vez que parodia en alguna medida su propio trabajo. Como buen intérprete de ese juego social que llamamos arte contemporáneo, deduce y exhibe con gesto irónico algunas de las estrategias que hacen de la creación, del mito de los orígenes y de la mecánica del mercado un movimiento único, articulado y complejo”.