¿QUIÉN SERÁ EL NUEVO GANADOR DEL X PREMIO LUIS CABALLERO?
Bogotá, Colombia - Los nominados fueron escogidos a través del Programa Distrital de Estímulos 2018 y cada uno recibió 17 millones de pesos colombianos para llevar a cabo su obra.
El Premio Luis Caballero es una iniciativa de la Alcaldía de Bogotá, cuya organización y puesta en escena pública está a cargo del Instituto Distrital de las Artes - Idartes. Los nominados a cada versión se seleccionan por una convocatoria pública que se realiza cada dos años, dirigida a artistas mayores de 35 años con mediana trayectoria, a través de la cual se configura un ciclo de intervenciones artísticas que presta atención a las cualidades espaciales, sociales, geográficas, históricas, políticas y arquitectónicas urbanas de los espacios que las albergan.
Las exposiciones terminarán en 2020, cuando los jurados de esta edición Juan David Laserna, Carolina Ponce de León y Santiago Rueda elegirán al ganador, quien recibirá 45 millones de pesos y una comisión de obra para un proyecto inédito que se expondrá en la Galería Santa Fe en 2021.
Gabriel Zea será el primer artista en presentar su obra Monumento al tornillo desconocido, en el Monumento a los Héroes. Como él los ocho nominados al premio estarán en distintos puntos de la ciudad (La Galería Santa Fe, el Museo de Arte Moderno de Bogotá, el Museo Santa Clara y el Banco de la República) haciendo una intervención desde la fotografía, el video, el sonido, la escultura, la pintura y la instalación.
Las exposiciones se preguntan por el transporte del país, la relación entre arte y mediación, el trabajador como una pieza reemplazable en el engranaje, descomposición de materiales desde la naturaleza hasta su relación con el ser humano, los secretos que guarda la tierra, el mundo de las semillas, las minas de sal, reflexiones sobre las políticas institucionales sobre el espacio público, y hasta por las sombras, evidenciado en la captura de Jesús Santrich en su residencia en el barrio Modelia en Bogotá.
Gabriel Zea fue el primero en abrir su exposición Monumento al Tornillo Desconocido en el Monumento a los Héroes, uno de los ocho proyectos de sitio específico que tienen lugar en la ciudad. Desde hace algunos años el artista se pregunta sobre lo que significa trabajar en el contexto actual, el del capitalismo, la angustia de la modernidad y las condiciones de los empleados, reflexión que relacionó con sus intereses poéticos.
La Decanatura (Elkin Calderón y Diego Piñeros) presenta su intervención en el Monumento a los Héroes como una crítica social sobre los precarios avances en materia de transporte en Colombia. De la mula al avión plantea un salto abrupto en el que se evidencia la poca planeación y el falso progreso. La exposición tiene como protagonista a una mula con la que los asistentes interactúan jalándola pero que siempre vuelve a su sitio. En los otros pisos son videos experienciales los que llaman poderosamente la atención de los visitantes.
Carlos Bonil presenta su obra en El Museo de Arte Miguel Urrutia como una reflexión sobre las ideas que se han solapado en los últimos años, a propósito de la verdad, la política y la concepción de la sociedad actual.
"Al recordar El triunfo de la muerte, de Brueghel el Viejo, pienso en la ciudad como un suelo turboso. Un espacio común con un montón de material orgánico en lenta descomposición. No solo pienso en los microorganismos muertos, vegetales, animales y humanos, también en los modos de pensar, las jerarquías y las posiciones políticas y religiosas. La única industria que sobrevive es la de la muerte”, señala Bonil.
Eduar Moreno asegura que Luis Caballero es sin duda uno de los pintores más reveladores de la modernidad, pero que también fue atrapado en ese mismo estadio. “Caballero enuncia cosas como ‘igual que me tocó ser artista, me tocó ser marica. Diría yo me tocó ser moderno’. Luis Caballero es alguien que trata de escapar de lo que le tocó. Yo pensaba muchas cosas sobre lo que significaba tocar y me encuentro con un sitio intocable. Santa Clara es un sitio de patrimonio y esa patrimonialidad también tiene que ver con la intocabilidad”, asegura.
Y es justamente ese carácter de lo intocable lo lleva a buscar una obra como esta, que tocará a los espectadores en todos los sentidos, los anímicos y los corpóreos. Quería tocar al otro. Es por eso por lo que incluyó a un grupo de mujeres que arreglan las uñas, quienes tienen quizás uno de los componentes más interesantes de su obra. Ellas, no solo contribuyen en el rompimiento de la patrimonialidad de la iglesia, donde se ubica la obra, sino que son fácilmente el ejemplo de lo que sucede en salones de belleza, donde opera la confesión con tranquilidad y el fenómeno de la ‘secresía’ -no se rompe el secreto-. Adicionalmente, un lugar que rompe los problemas de subalternidad, todos en el mismo lugar, al mismo nivel. Esa es su propuesta Provocar el archivo.
Delcy Morelos presenta su proyecto Moradas. La artista de Tierralta (Córdoba, Colombia), realizará su intervención in situ en la sala pública de arte más grande del país. Morelos asegura que “el espacio le habla”. Primero desde el silencio, que se aproxima sin tener algo preestablecido, solo escucha y el resto es consecuencia. Luego, a través de la observación de la luz y cómo actúa en el espacio, las oscuridades, el clima del lugar, la profundidad, las distancias, todo posibilita la relación con su obra.
Instalada en el espacio subterráneo de la nueva Galería Santa Fe, Moradas refiere al ciclo de producción de la vida en el que la muerte tiene un papel intrínseco. La tierra, en donde sepultamos nuestros muertos, es el sustrato en el que la vida tiene lugar y donde los restos de los seres se transforman en abono, fertilizan la tierra y posibilitan la producción de nueva vida.
María Elvira Escallón representael sentimiento y el anhelo de paz de los colombianos en su obra En el fértil suelo – La travesía, que será exhibida en el Museo de Arte Moderno de Bogotá.
Su inspiración vino con La Ilíada. “Detuvieron los corceles, bajaron los carros y dejando las armaduras en el fértil suelo se pusieron muy cerca los unos de los otros”, una imagen de la obra de Homero que Escallón encontró similar al momento de dejación de armas en el conflicto armado colombiano. Aqueos y Troyanos, después de 10 años de lucha se desarmaban en el campo de batalla, enemigos históricamente irreconciliables ahora se encontraban expuestos y vulnerables. Ejército y Farc hacían lo propio con un acuerdo de paz.
Por ahora, las ultimas dos muestras, de Sánchez y de Buenaventura, se encuentran interrumpidas por la pandemia.
Alguna vez comimos maíz y pescado, la exposición de María Buenaventura, ubicada en ga Galería Santa Fe, bajo la Plaza de La Concordia. El espacio se toma aquí como subsuelo del mercado. Lugar del mundo de abajo.
Torcido, de Edwin Sánchez refiere a que la ciudad oculta lo insoportable, el fenómeno que se da gracias a las políticas urbanísticas que proyectan un modelo de ciudad basado en la exclusión de todo aquello que no está contemplado dentro de sus ideales de progreso. Esta exclusión crea lugares como la Zona Especial de Servicios de Alto Impacto (conocida como zona de tolerancia) del barrio Santa Fe donde acontecen numerosos fenómenos que aparecen a partir del actuar de quienes constituimos la sociedad.
Torcido es una instalación que piensa los fenómenos propios de la zona de tolerancia del barrio Santa Fe a través de un concepto estructural, el ocultamiento, que se presenta tanto en los métodos usados por las políticas administrativas, como en el actuar de los individuos al enmascarar sus deseos más íntimos.
Los jurados de esta versión son Carolina Ponce de León Nieto, quien fuera la directora de artes plásticas de la Galería de la Raza en San Francisco, Juan David Laserna Montoya, magíster de la Universidad Nacional, ganador del IX Premio Luis Caballero 2017 y Santiago Rueda Fajardo, PhD cum laude en Historia, Teoría y Crítica de Arte de la Universidad de Barcelona (España). Y uno de los principales investigadores en fotografía colombiana.