Retratos Paraguayos en Dos Tiempos
La exhibición Retratos paraguayos en dos tiempos, en el CAV/Museo del Barro, presenta obras cronológicamente distintas que, sin embargo, convergen de modo revelador, aunque sus autores -José María Blanch y SUB [Cooperativa de Fotógrafos] - nunca estuvieron en contacto.
El ensayo 17 veces volver -realizado en 2009 por SUB [Cooperativa de Fotógrafos]- retrata el asentamiento paraguayo “13 de Mayo” - departamento de Itapúa, límite con Misiones (Argentina)- desalojado 17 veces en los últimos seis años. No deja de sorprender la conexión visible entre estas imágenes –bellas y dramáticas- y el trabajo desarrollado en los años ‘70 y ‘80 por el sacerdote jesuita José María Blanch, radicado en Paraguay desde 1954. En principio dedicado a la fotografía sólo para obtener insumos que sirvieran a su labor educativa, Blanch –de origen catalán- registró con pasión y perseverancia los rituales cotidianos del campo paraguayo. Sus imágenes en blanco y negro no han eludido –en su pretendido costumbrismo- los momentos duros de la represión del dictador paraguayo Alfredo Stroessner, como lo testimonian las series dedicadas a las familias campesinas que integraban las Ligas Agrarias Cristianas, perseguidas por la dictadura.
Blanch y SUB nunca tuvieron contacto. Hay, sin embargo, sensibilidades afines, una común manera de aproximarse al sujeto retratado. Desde la distancia, los desalojos y los juegos, la recolección de mandioca y las corridas de la policía, las siestas baldías y la inevitable fatiga, todo podría ser leído como una sola y misma historia en diferido: el campo “rozado” de Blanch resulta tan inhóspito como el mar de soja retratado por SUB y las escenas, a uno y otro lado del tiempo, parecen signadas por un mismo diagrama. En ambos casos, las fotografías delatan cierta sensación de “extranjería”, una distancia melancólica que confiere poesía a lo que podríamos considerar documento. Y comparten, claro está, las condensaciones del silencio, el miedo, la tensión de la vulnerabilidad. Hasta la secreta esperanza.
Hasta el 23 de octubre, CAV/Museo del Barro, Grabadores del Cabichuí c/Cañada, Asunción, Paraguay.