Alfonso Castillo
Centro Cultural Recoleta, Buenos Aires
Sin lugar a dudas la fotografía, aunque también el cine, a lo largo del siglo XlX y el XX, han contribuido a configurar el perfil identitario de las grandes urbes mundiales, siendo éstas motivo privilegiado de sus tomas.
A pesar de la recurrencia por parte de numerosos artistas, los modos de aproximación al tema no manifiestan haberse clausurado, más bien lo contrario, continúan en perpetua apertura.
“La persistencia y el juego”, exhibida recientemente en el Centro Cultural Recoleta, se convierte en ejemplo de lo expresado. La muestra reúne parte de la producción reciente del fotógrafo Alfonso Castillo, cuyo eje gravita en torno a las ciudades que él ha recorrido y vivenciado. Tal vez, este último sentido pueda vincularse a aquello que la lengua francesa ha denominado como flaneur, término que remite al sujeto que funda su experiencia en el deambular, sin rumbo, por el espacio urbano.
La producción que presenta parece alinearse, formalmente, dentro de la tradición geométrica que anida en la fotografía, siendo uno de sus ejemplos emblemáticos Paul Strand. El ojo de Castillo abstrae fragmentos de la ciudad y les da entidad propia pero siempre dejando indicios de la totalidad.
Otro procedimiento afín a su despliegue artístico aparece centrado en la repetición de elementos, lo cual genera una suerte de trama fotográfica que, en ocasiones, se sustenta en el reflejo que permite la propia arquitectura. Todo ello fundado en una precisa composición y un uso expresivo, y riguroso, del color; pero también en la elección de un adecuado formato que tiene su correlato en un exquisito cuidado del copiado.
Por otra parte, merece destacarse la curaduría de Victoria Verlichak por su rigurosa selección de obra, así como por su efectivo diseño de montaje.