CLAUDIA ANDUJAR: LA LUTTE YANOMAMI - FONDATION CARTIER POUR L’ART CONTEMPORAIN
CLAUDIA ANDUJAR: LA LUTTE YANOMAMI - FONDATION CARTIER POUR L’ART CONTEMPORAIN
La Fundación Cartier presenta la más grande exposición dedicada al trabajo de la fotógrafa brasileña Claudia Andujar que, desde la década de 1970 ha dedicado su vida a la fotografía y la defensa de los Yanomami, uno de los pueblos indígenas más importantes de la Amazonas brasileña.
Muestra más de 300 fotografías en blanco y negro o en color, obras inéditas, una instalación audiovisual, así como dibujos realizados por artistas yanomami y documentos históricos. Reflejando los dos lados inseparables de su reflexión, uno estético y el otro político, revela la gran contribución de Claudia Andujar al arte fotográfico y el papel esencial que desempeña en la defensa de los derechos de los indios yanomami y la selva que habitan.
Su primer contacto con los indios yanomami remonta a 1971, mientras participaba en un reportaje sobre el Amazonas; fascinada, decidió emprender un profundo trabajo fotográfico sobre el mundo yanomami. Las fotografías tomadas durante este período revelan las diversas técnicas con las que experimentó para traducir lo que percibió de la experiencia chamánica de los indios yanomami. Al aplicar vaselina en la lente de su cámara, utilizar película infrarroja o jugar con la luz, Claudia Andujar crea distorsiones visuales que confieren a sus imágenes un cierto surrealismo. Favorece los primeros planos de rostros o fragmentos del cuerpo, y crea efectos de claroscuro para instaurar una sensación de intimidad y poner en valor con empatía la interioridad de sus sujetos. Al mismo tiempo y para comprender mejor su cultura, ella propone a los yanomami que representen su propio universo metafísico proporcionándoles papel, bolígrafos y marcadores. En la exposición se presenta una selección de estos dibujos que muestran escenas mitológicas o rituales y visiones chamánicas.
El final de la década de 1970 marcó un punto de inflexión en su carrera. La construcción, por parte del gobierno militar brasileño, de la carretera Transamazoniana en el sur del territorio yanomami abre la región a la deforestación, así como a proyectos de colonización agrícola, y provoca la destrucción de comunidades enteras al promover la propagación de epidemias. Esta dramática situación que le recuerda el genocidio que presenció en Europa, la empuja a participar plenamente en la lucha por la defensa de los derechos de los yanomami y la protección de su selva. En 1978, funda con el misionero Carlo Zacquini y el antropólogo Bruce Albert, The Commissão Pro-Yanomami (CCPY) y se embarca en una campaña de casi quince años para la delimitación de su territorio, una condición esencial para la supervivencia física y cultural de este pueblo.
En esa época, durante una campaña de vacunación, Claudia Andujar toma fotografías de los yanomami que portan un número alrededor de su cuello para la identificación en las fichas médicas. Posteriormente retomará estas fotografías en una de sus series más famosas, la de "Marcados". La ambigüedad de estas imágenes radica en el malestar creado por la identificación numérica de los individuos, que recuerda los tatuajes de los judíos durante la Shoah, aunque el proceso aquí, por el contrario, está configurado para la supervivencia de un pueblo. Fotografías inéditas de esta serie se exhiben por primera vez en la exposición. En respuesta a los decretos firmados por el gobierno brasileño (1989) para desmembrar el territorio yanomami en un archipiélago de diecinueve micro reservas, creó Genocide of the Yanomami: Death of Brazil (1989-2018), un manifiesto audiovisual producido de fotografías tomadas de sus archivos que la artista vuelve a fotografiar usando varios filtros e iluminación. Verdadero punto culminante de la exposición, este trabajo muestra la agitación de un mundo indígena devastado por la depredación de la civilización occidental. Una banda sonora de canciones yanomami y música experimental acompaña la instalación. Al relatar la lucha de toda una vida y revelar la riqueza formal del trabajo de Claudia Andujar, la exposición muestra por primera vez su obra en todo su esplendor y complejidad. Ofrece una inmersión en el universo cosmológico y la vida cotidiana de los yanomami, así como una poderosa acusación política de los abusos de los que son víctimas.