FORMAS DE EXHIBIR LA CRUELDAD, LEÓN FERRARI EN EL MUSEO REINA SOFÍA

Por Matías Helbig, Corresponsal en Europa | febrero 18, 2021

En la 4º planta del Edificio Sabatini del Museo Reina Sofía (Madrid, España), un proyecto colaborativo gestionado por la FALFAA (Fundación Augusto y León Ferrari Arte y Acervo) y el Museo Reina Sofía presenta La Bondadosa Crueldad-León Ferrari, 100 años. En el marco del centenario aniversario de León Ferrari (Buenos Aires, 1920-2013) la exposición tiene como objetivo resaltar en el continente europeo el trabajo de una de las figuras más importantes de la escena internacional a partir de los años 60 hasta su muerte. 

El ambicioso proyecto, del cual también forman parte el Van Abbemuseum (Eidenhiven, Países Bajos) y el Museo Nacional de Arte Moderno Centro Pompidou (París, Francia) será exhibido también en estas dos instituciones.

La Bondadosa Crueldad, Museo Reina Sofía. Ph: Joaquín Cortés y Román Lores

La Bondadosa Crueldad – León Ferrari, 100 años, cuyo nombre está tomado del poemario ilustrado que Ferrari dedicó a su hijo, está concebida de manera global. Cada uno de los ejes curatoriales que estructuran la exposición dialogan constantemente en toda la muestra y poseen como núcleo la formación original de un lenguaje artístico que el artista supo diseñar, renovar y ejecutar en cada uno de sus trabajos. Es desde esta perspectiva que se despliegan, a lo largo de siete salas, más de trescientas obras y archivos que corresponden a la trayectoria del artista argentino.

Sin embargo, con el objetivo de no ser exhaustivo, hay dos aspectos en los que podemos profundizar sin perder de vista el valor total de la exposición. Estos son: la lectura político-jurídica de los textos religiosos (principalmente la Biblia) y la apropiación de los medios masivos y los documentos oficiales como posibles elementos compositivos del arte. 

Estos dos vectores están perfectamente puestos a disposición de los visitantes en la sala que abre la exposición. Allí se exhiben dos de las obras que causaron mayor repercusión a lo largo de la carrera de León Ferrari: La justicia/ Autocensura y Juicio Final. Ambas producidas en la década de los 90 (en el caso de la primera, es una instalación que León Ferrari produjo en respuesta de su obra original La Justicia). Toda la sala está enmarcada, de manera muy precisa por la curaduría de la exposición, bajo una carta enviada al Vaticano por el CIHABAPAI (Club de Impíos Herejes Apóstatas Blasfemos Ateos Paganos Agnósticos e Infieles), fundado por León Ferrari formó parte, en respuesta a una noticia que refería a la revisión del Juicio Final por parte de Juan Pablo II (Papa en aquel momento). La carta culminaba: “Le solicitamos entonces volver al Pentateuco y tramitar la anulación del Juicio Final y de la inmortalidad”. Es a partir de esta posición que León Ferrari comienza a desarrollar una serie de obras que adjudican al Pecado Original y al Juicio Final la violencia que durante la historia moderna gobernó Occidente. Pero a ello volveremos más adelante.

Lo que cabe destacar, en primera instancia, es la traslación de los dos momentos más significativos de la tradición judeocristiana hacia un marco de discusión jurídica. Ese primer paso se manifiesta en la carta, donde el CIHABAPAI solicita, tal fuera un proyecto de ley, modificar las Escrituras. El segundo paso ya corre por cuenta de Ferrari completamente (y se recontextualiza dentro de un segundo escenario de controversia política): La Justicia/ Autocensura es una instalación que consta de una balanza cubierta de excremento bajo una jaula ocupada por una gallina embalsamada; sobre la pared un conjunto de documentos escaneados reproduce la polémica que la obra original suscitó en el año 1992 en el Museo Sívori (Buenos Airs, Argentina). El motivo de la polémica, al contrario de lo que uno podría esperar, no fue la banalización u ofensa de ciertos símbolos sino el hecho de que la gallina que entonces ocupaba la jaula estaba viva (de ella el excremento que en la actualidad cubre la balanza). León Ferrari fue denunciado por la Sociedad Argentina para la Protección de los Animales (SAPA) y la obra fue removida de la exposición. Como réplica, el artista reelaboró la obra, esta vez, con una gallina embalsamada, e incluyó una serie de documentos: su breve correspondencia con el SAPA, donde ponía de manifiesto las contradicciones del marco legal que amparaban las denuncias echas por los visitantes de la exposición, y las notas que algunos espectadores, indignados, dejaron sobre la obra.

   

       

Ahora retomemos la cuestión bíblica y su consecuencia en el devenir histórico según Ferrari. En la tercera sala de la La Bondadosa Crueldad-León Ferrari, 100 años está presentada una serie de numerosos collages —Relecturas Bíblicas— que Ferrari fue desarrollando durante toda su vida. El artista se apropia de la iconografía cristiana y las introduce en imágenes eróticas de Oriente, por un lado, y en fotografías del nazismo, la bomba atómica, la guerra de Vietnam y otros tantos conflictos bélicos, por el otro. El diálogo que las imágenes establecen entre sí contrasta el imaginario oriental —colmado de ilustraciones eróticas— con el pudor y la culpa judeocristiana, y develan el carácter hostil de la tradición occidental leída en clave política. 

En última instancia, y haciendo a un lado estos dos ejes que engloban gran parte de la obra de Ferrari, la exposición que permanecerá en el Museo Reina Sofía hasta el mes de abril indaga en los procesos creativos del artista, en la importancia de su vínculo con su padre arquitecto, los efectos del exilio a Brasil tras el Proceso de Reorganización Nacional —dictadura militar que tomó el gobierno argentino entre 1976 y 1983—, en la correspondencia con el poeta Rafael Alberti y en la relevancia de su relación con las letras en general. Toda la obra está minada de referencias poéticas que van desde Jorge Luis Borges, especialmente en la serie La espera, exhibida en la segunda sala del museo, hasta referencias estilísticas indirectas que recuerdan la pluma sucia de un Osvaldo Lamborghini, es el caso de La justica excrementada. Asimismo, hace un recorrido por el denominado “arte ecológico”, donde la palabra es la materia de la obra de arte, y el “arte visual escrito”, composiciones en las que la palabra escrita se mimetiza con la línea; todas ellas, estrategias para desarmar el entorno y lanzar al público la crueldad que subyace la realidad mediada. Todas ellas ,estrategias que dejan en evidencia la bondadosa crueldad.  

 

 

 

INFORMACIÓN DE LA EXPOSICIÓN

Exposición: La bondadosa crueldad-León Ferrari, 100 años

Comisarios: Fernanda Carvajal, Javier Olmo, Andrea Wain y equipo FALFAA.

Cuándo: 15/ 12/ 2020 –  12/ 04/ 2021

Dónde: Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Arte Caja de Burgos