Marcelo Grossman
E.C. Fotografía Contemporánea. Buenos Aires
En la serie Guilty!, Marcelo Grosman (Buenos Aires, 1958) se aventura por un camino incómodo, preguntándose quiénes son los culpables en una sociedad que fabrica criminales, que juzga por las apariencias (de color, sexo, proveniencia). Son fotografías (algunas de tamaño mural) exhibidas en E.C. Fotografía Contemporánea, un espacio que se ganó un sitio en el mapa artístico de Buenos Aires, incluso organizando un premio para estimular su creación. A través de la sobreimpresión de placa sobre placa, el artista crea una galería de potentes personajes con rostros de contornos difusos que desafían a la fotografía penitenciaria, esa que fija y, a la vez, diluye la identidad de los internados.
Las obras de Grosman, que exhibe individualmente desde 1989, evocan la imagen del “culpable” construida por la prensa sensacionalista que no duda en inflar crímenes e inventar mal hechores y combaten las teorías racistas que sostienen que existen criminales natos, reconocibles por la estructura ósea de la cabeza y los rasgos de la cara. En su texto de presentación, Shila Vilker afirma que las imágenes sugieren que “los culpables, son el objeto sacrificial de nuestra cultura. ¿Son quienes ejercen la violencia o quienes padecen la furia punitiva? Propuesta riesgosa, que pide reflexión a una sociedad atemorizada por la inseguridad realmente existente.