Mónica Girón

Es preciso señalar que la artista nació en San Carlos de Bariloche, y no porque su obra sea autorreferencial sino porque ese dato es fundante de todo su trabajo. Territorio de soledades y belleza, de penurias y esplendores, la aún casi deshabitada y ventosa Patagonia fue un suelo peleado de forma desigual entre los pueblos originarios, diezmados, y los de afuera, en la históricamente llamada “Conquista del Desierto”. Notables son las prendas de Ajuar para un conquistador (1995).

Límite y desplazamiento en sus series sobre papel, con círculos (casi) concéntricos que, incluso, a veces se superponen. En Eclipses, las imágenes aparecen perteneciendo al sistema celeste tanto como al ojo humano, con una distintiva pupila, que en lugar de iris, está rodeada por una órbita blanca. Por el contrario, en la serie SX se invierten los términos y la pupila está ahora vacante, y aquí los redondeles se reproducen como el pedregullo en las orillas de los lagos, se estiran, multiplican, se suman y llegan a ser muchos. ¿Dos que se aman?