Odalis Valdivieso
Alejandra Von Hartz, Miami
Paper Folding, la serie más reciente de Odalis Valdivieso es un interesante retruécano. Y me baso en ello no únicamente en el complejo proceso ad infinitum de manipulación manual y digital que sostiene la obra, y tras el que subyace una constante postergación del significado, sino en el sinnúmero de revisiones de la propia tradición artística que comprende esta serie.
La serie en la que viene trabajando Valdivieso desde hace alrededor de tres años parte de una doble necesidad. De un lado, la de indagar en la abstracción geométrica, haciendo una revisión del fuerte lastre modernista asociado a este quehacer. Del otro, la necesidad de liberación del componente narrativo–opresivo en muchas ocasiones en tanto predetermina los derroteros formales de la obra. Lo procesual deviene entonces protagonista en la serie Paper Folding.
Valdivieso utiliza como punto de partida una de las primeras cámaras digitales aparecidas en el mercado en la década de los años noventa. La pixelación procedente de estas fotografías de pequeño formato deviene abstracción que luego es sometida a largos procesos de intervención que comprenden la distorsión repetida del original a través de procesos manuales y digitales (las imágenes son torcidas, pintadas a la aguada y escaneadas, para luego ser modificadas en el ordenador). El proceso puede ser repetido indefinidamente. Una vez satisfecha con el resultado, estos caprichosos objetos de papel son plegados, creando la ilusión de pinturas enmarcadas.
Folding paper constituye un ensayo a través del cual la artista procura liberar al medio fotográfico de la extendida noción de realismo, tradicionalmente asociado a él. El largo proceso de intervenciones múltiples basado en un sistema de multiplicación y manipulación, implica un constante aplazamiento del significado donde lo lúdico reemplaza cualquier pretensión romántica de trascendencia de la obra per se, instaurándose este proceso liberador como el sentido último de la obra.
La obra-objeto final, de gran belleza plástica, subraya lo procesual como núcleo esencial de esta serie que asume la creación como proceso genérico que rehúsa arquetipos modernistas todavía hoy definitorios dentro del arte, tales como originalidad, perdurabilidad y delimitación de género y medio.
La serie, ahora expuesta en las galerías Alejandra Von Hartz y Dimensions Variable y en el Miami Art Museum como parte de la exposición “Miami New Works”, se compone de cuarenta y cinco piezas que pueden ser vistas en su totalidad únicamente a modo de portafolio.