Oscar Smoje
Maggio Boutique de Impresión Buenos Aires
La nueva muestra de obras sobre papel de Oscar Smoje (Buenos Aires, 1939), Oso inédito, es digna de celebración ya que es cada vez más difícil ver la producción de este artista en público. Smoje no suele ocuparse de sus exhibiciones, no tiene tiempo; desde su cargo de director del Palacio Nacional de las Artes, en Buenos Aires, establece las de los demás como la reciente Menos tiempo que lugar. El Arte de la Independencia, un proyecto curado por Alfons Hug que comprendió videos, fotos, pinturas, instalaciones de 22 artistas de Latinoamérica y de Alemania. Es que el artista y docente universitario dirige desde 2006 ese sitio de exhibiciones temporarias que también organiza los salones nacionales en todas sus disciplinas y atesora las obras premiadas, al que todos llaman Palais de Glace (inaugurado en 1910 como pista de patinaje sobre hielo).
Oso inédito despliega 40 piezas en grafito, tinta y lápiz color, acrilico, de los últimos 20 años en Maggio Boutique de Impresión, el espacio inaugurado hace dos años por Sebastián Maggio en la Recoleta. Entre la abstracción y la figuración, las obras ponen en juego emociones privadas (recuerdo del padre croata) y homena- jes públicos (Pessoa y sus heterónimos), recuerdos infantiles y vuelos maduros. Son dibujos y pinturas que exhiben una notable expresividad; la pasión de Smoje por la vida y el trabajo se filtra tanto donde aparecen sus certeros trazos en tinta negra como en las composiciones donde todo es color y movimiento.
“La idea de esta muestra surge hace largos años luego de mi primer encuentro con Oscar Smoje. Yo conocía obra de él: la serie de Las Sombras, Los Boxeadores, El Buzo, la serie de rastros de una civilización perdida [denominada satíricamente por el artista como Maldonásica Palermitana]...”, escribe en el catálogo la curadora Grace Bayala. “Una década más tarde (...) El tiempo (...) nos volvió a encontrar en el taller (...). Esta vez eligiendo, entre cientos de pinturas, las mejores. ‘Quiero que busquemos como se buscan y encuentran los mejores vinos en una bodega...’, me dijo”. La analogía de los buenos vinos con la mejor obra no es azarosa. Elogio al trabajo, Smoje es un excelente y probado cocinero y sabe acompañar bien el fruto de sus tareas culinarias. La obra de Smoje “diario y collage de este país”, como dijo Miguel Briante también suele transitar el compromiso político y social, el mismo que lo convocó al diseño del diario Noticias, en los años ’70, y lo inclinó a aceptar la secretaría de Extensión Cultural del Instituto Universitario Nacional de Arte, la direc- ción de Extensión Cultural de la Escuela de Artes De la Cárcova desde 1994 hasta 2000.