Paraguay Rapé
Museo del Barro, Asunción
Interesada en la compleja relación entre paraguayos y argentinos, impregnada aún por rémoras de guerra y complicidades dictatoriales (Triple Alianza, 1964-1870; Plan Cóndor), tensiones de frontera e inmigrantes ilegales, Victoria Verlichak reúne en Paraguay rapé (Camino paraguayo) a las argentinas de ascendencia paraguaya Matilde Marín y Luna Paiva y a los paraguayos Joaquín Sánchez y Ángel Yegros. En el marco del Bicentenario del Paraguay, esta breve e intensa muestra, articulada con precisión y poesía, se vio primero en el Centro Cultural Recoleta de Buenos Aires y ahora en el Museo del Barro de Asunción.
En la instalación Suite Villarrica, Marín recupera una historia familiar de amor y decisión, las turbulencias políticas que llevaron a su padre, y a tantos otros paraguayos, al exilio en Buenos Aires a través de imágenes superpuestas y fragmentos encontrados. Luna Paiva genera un video de atmósfera ficcional a partir de imágenes captadas por su padre, el célebre fotógrafo Rolando Paiva, durante su periplo río arriba por el Paraná; revisita su mundo y ya en el título, Paiva Paraná Paiva, instala el nexo entre las dos generaciones.
El video Yukyty (Campos de sal) de Joaquín Sánchez trabaja la memoria y el anhelo de superar los traumas del pasado. Exquisita y trágica belleza en las imágenes de una vieja lavandera que rememora, al son del agua que corre, la masacre de Acosta Ñu (16/8/1869), cuando 3.500 niños paraguayos, disfrazados de soldados, murieron combatiendo contra 20.000 hombres del ejército aliado. Ángel Yegros aborda la historia a partir de su propia genealogía. Mientras lee el conmovedor poema que su tatarabuelo Fulgencio -prócer de la Independencia- escribió en la cárcel antes de ser decapitado por orden del dictador Francia, en el video Tekoha (El lugar del ser) discurren documentos de relatos escamoteados. Luego, la reiteración en guaraní de un canto a la creación y la belleza reequilibra el mundo.