REVIEWS - MACO 2005

Mexico DF

Por Calzada Villanueva, Mirna
REVIEWS - MACO 2005
El año 2005, desde que comenzó, se convirtió en una gran temporada, de muchas esperanzas, casi de fiebre, para las ferias. Iniciamos el año muy bien preparados, pensando en que los detonantes de esta cadena de éxito en ferias internacionales de México eran, en primer lugar, la emoción de haber resultado el paí­s invitado en ARCO, lo que le permitió a 18 galerí­as mexicanas viajar sin costo, con grandes propuestas para enseñarle al mundo; y en segundo lugar, el éxito que MACO obtuvo en su primera edición, y la postura psicológica que generó en el público cautivo, especializado o no, de México, creando una gran esperanza para la segunda edición.
MACO, méxico arte contemporáneo, de nuevo en el centro de exposiciones Expo Reforma, tuvo un público cercano a los 18.000 asistentes y la participación de galerí­as de Alemania, la Argentina, Austria, Brasil, Canadá, Costa Rica, España, Estados Unidos, Francia, México y Portugal.
MACO propició una vez más la convivencia entre curadores, galeristas y coleccionistas de varios paí­ses. Además, a pesar de no contar con el financiamiento adecuado, ni con apoyo gubernamental (a diferencia del resto de las ferias de arte internacionales), logró ser rentable para la mayorí­a de las galerí­as participantes.
Este año MACO tuvo muchas ventajas, gracias al éxito del año pasado; pero también por ello más responsabilidades y compromisos para con la gente, tanto expositores, como público en general. Las expectativas se elevaron mucho, y siendo éste el año de México para la escena internacional, la feria mexicana debí­a estar a la altura.
La gran mayorí­a de las galerí­as extranjeras que habí­an participado el año pasado reincidieron. Esto habla mucho de una feria, ya que por ejemplo, si las galerí­as de México reinciden no es demostración radical de que la feria, como mercado, funciona. Finalmente es más fácil que sea en el propio paí­s de origen, ya que no sólo es más barato, sino que se puede transportar con todas las facilidades, sin necesidad de embalajes o seguro de obra internacionales. Sin embargo, cuando una galerí­a que invierte en venir desde su lugar de origen, repite al año siguiente, es porque definitivamente tuvo una buena experiencia y venta el año anterior. Esperamos que el próximo año este fenómeno se repita y atraiga, además, un mayor número de extranjeros y nuevas propuestas, para así­ lograr, finalmente, que el proyecto se consolide.
En realidad, los que ya eran coleccionistas, lo seguirán siendo, y tal vez incluso, comprarán ingenuamente, en otras partes del mundo, tal vez pensando que así­ vale más o que se ahorrarán los impuestos. El fenómeno realmente interesante que debe enorgullecer a Zelika, Directora de MACO, es el haber logrado provocar expectativa entre un público general, de todo tipo, que lo ha impulsado no sólo a indagar sobre el tema, sino a saber que, desde el momento en el que cualquier persona lo decida, puede convertirse en un coleccionista. MACO abrió los ojos de cientos, si no es que miles, de mexicanos, al panorama de mercado internacional de arte contemporáneo. Y sea lo que sea que gasten, mucho o poco, saben que todos tienen la posibilidad de tener arte y formar una colección. Esa magia, que al ver a una persona común llegar a un espacio y adquirir una pieza para su casa, se detona, es algo que ya nadie pensaba que fuera posible en México.
En este momento sólo queda esperar para poder comprobar la consolidación de MACO como un evento exitoso y de prestigio, y así­ demostrar a los escépticos que el mercado mexicano puede convertirse en uno importante, y que aquél gran coleccionismo que alguna vez existió tiene posibilidades de renacer. MACO es esa oportunidad, no sólo ante el medio del arte y la cultura, sino para los mexicanos más jóvenes, de ver la posibilidad de la compra de arte como una inversión segura y a largo plazo.