Cecilia Paredes

En esta propuesta sus obras conviven con los objetos de la colección bajo una nueva luz crítica. Paredes plantea así una reescritura del discurso histórico contenido en el Museo, a través de la estrategia de enfrentar las piezas “testigos” de la conquista, evangelización y virreinato del Perú, con las nuevas creadas a partir de la apropiación y reinterpretación de ciertos motivos religiosos y eventos de la misma época. Paredes mira hacia el pasado, e interviene en el espacio de admiración y veneración por excelencia de “ese” pasado – el museo –. De esta forma, cuestiona la manera en la que construimos ese gran discurso oficial de la historia, proponiendo la aparición de narrativas paralelas, que rescatan discursos no representados antes y que generan cuestionamientos que es posible relacionar hasta con el contexto actual del país.

La prohibición, los preceptos religiosos, el no poder mirar, no poder decir, el castigar la curiosidad, son elementos presentes a lo largo de toda la exposición. El rebelarse frente a estas prohibiciones, es proyectado hacia el espectador. “De mil flechazos herido ” entonces posibilita una ruptura del discurso oficial y da paso a un espectador que como testigo cuestiona su propia perspectiva sobre la Conquista y la de su contexto actual, para abordar lo complejo de las representaciones y de las subjetividades relacionadas con la violencia. Cecilia Paredes mira el pasado, lo interviene, lo reescribe y propone el camino de curiosidad de la mujer de Lot: ella miró atrás, los espectadores están invitados a ver también por un instante, y hacia lo lejos, la representación de la barbarie.