Siempre me han llamado la atención los artistas que tiene esa capacidad de acercarse y distanciarse de la realidad, Ronald Morán, (salvadoreño) es uno de ellos; en este caso, nos ofrece un doble distanciamiento: el distanciamiento de una tradición mimética que recicla la realidad con imágenes repetidas hasta el vértigo y, por otro lado, el distanciamiento obligado por la pandemia del Covid 19.