LA ANTOLOGÍA DE JUAN ENRIQUE BEDOYA EN FUNDACIÓN LARIVIÈRE

En sus últimas semanas de exhibición, la muestra Mi país no es Grecia ofrece una de las panorámicas más amplias del fotógrafo peruano: entre lo popular, lo precario y lo poético.

LA ANTOLOGÍA DE JUAN ENRIQUE BEDOYA EN FUNDACIÓN LARIVIÈRE

Fundación Larivière presenta Mi país no es Grecia, una exposición que reúne más de 250 piezas del fotógrafo peruano Juan Enrique Bedoya, bajo la curaduría de Alexis Fabry. Se trata de una antología inédita en Buenos Aires que condensa más de cuarenta años de trabajo y experimentación visual.

 

El título, tomado del poema del peruano Luis Hernández, sugiere una tensión entre mito e identidad: una negación del canon clásico y, al mismo tiempo, una afirmación de lo propio. En la obra de Bedoya, los márgenes, lo cotidiano y lo “no monumental” se transforman en ejes estéticos y políticos.

La muestra despliega un amplio abanico de formatos: fotografías analógicas y digitales, collages, bromuros al óleo, dioramas, ensamblajes, murales y objetos de archivo personal. Cada pieza forma parte de un entramado abierto, sin un recorrido preestablecido. El visitante puede moverse libremente, trazar conexiones entre imágenes y materiales, y construir su propia lectura.

 

Bedoya explora lo que llama una “arquitectura sin arquitecto”: fachadas anónimas, capillas de carretera, restaurantes derruidos, estructuras sin nombre que, al ser fotografiadas de frente y a la misma distancia, adquieren una presencia monumental. La ausencia de artificio es aquí un gesto de respeto y de observación atenta hacia lo marginal, hacia lo que persiste fuera del relato oficial.

En paralelo, los retratos tempranos del artista —hombres y mujeres de distintas clases y contextos— revelan una mirada igualitaria que disuelve jerarquías. Inspirado por álbumes de figuritas, revistas populares y la gráfica de consumo masivo, Bedoya combina estrategias del arte conceptual con una sensibilidad profundamente local.

 

El curador Alexis Fabry recuerda su primer encuentro con la obra en Lima, en 2008, cuando un catálogo hallado en la librería del MALI le permitió descubrir esa tensión entre cultura alta y baja que hoy articula la exposición. En su lectura, la potencia de Bedoya reside en su capacidad para borrar fronteras entre lo documental y lo artístico, entre lo espontáneo y lo deliberado.

La exposición incluye además la publicación de un catálogo bilingüe, editado por Ediciones Larivière, que recorre en doce capítulos la trayectoria del fotógrafo, con textos de invitados y reflexiones del propio Bedoya sobre su infancia, su paso por el periodismo y su relación con la cultura popular.

 

Mi país no es Grecia puede visitarse hasta el 18 de octubre de 2025 en Fundación Larivière – Caboto 564, La Boca, Buenos Aires (Argentina).

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